Gerardus Mercator (1604)

Música de fondo: Patrick de Arteaga

El mapa de la península Ibérica corresponde al Atlas, sive cosmographiae meditationes de fabrica mundi et fabricati figura”del geógrafo, cartógrafo y matemático flamenco Gerardus Mercator (1512-1594). El atlas se compone de 164 mapas grabados y la publicación de la edición que se encuentra en la Biblioteca Nacional de España está datado cerca de 1604.

Gerardus Mercator ha pasado a la historia por la “proyección de Mercator”. Esto es un tipo de proyección cartográfica ideada en 1569 para confeccionar mapas de la superficie terrestre. Su innovación radica en que es un tipo de proyección cilíndrica tangente al ecuador, lo que facilitaba la navegación de los marineros de la época. Sin embargo, también tiene muchos detractores porque deforma ciertos territorios como África y Sudamérica que se observan inferior a la realidad.

Respecto al mapa en cuestión, a pesar de su antigüedad, el autor muestra con gran ápice de detalles los elementos geográficos como cordilleras, ríos, cabos y localidades. Se puede observar los diferentes reinos que formaban la Monarquía Hispánica. De este modo, en mayúscula, se puede intuir las principales entidades políticas del reino de los primeros Austrias (Carlos I y Felipe II).

Uno de los eventos más tradicionales de Almansa es su feria. Se tienen noticias de ella desde principios del siglo XIV. Sin embargo, será el rey Juan II de Castilla, quien de forma oficial la regularice junto a las de Villena y Chinchilla. A mediados del siglo XVI, la Feria de Almansa tendría 15 días francos para su celebración en torno a la festividad de Todos los Santos. Era frecuente que la Feria de Almansa se instalase en el Paraje junto a la ermita de Nuestra Señora de Belén, ya que era un lugar próximo al camino real y a la cañada real. Además, contaba con una acequia de agua corriente y zonas arboladas. La Feria se consolidaría tras la Guerra de Sucesión y el privilegio del rey Felipe V por el apoyo a la causa borbónica. El rey por real provisión fechada el 10 de septiembre de 1707, concedía a la población una Feria franca de quince días de duración entre el 25 de abril y el 9 de mayo.

José Ibáñez – Historiador